La realización de la obra ha corrido a cargo del taller de Guzmán Bejarano, que en la actualidad es regido por Manuel Guzmán, hijo del conocido tallista.
Del paso actual, se conservarán los cuatro candelabros de guardabrisas de las esquinas, así como las maniguetas, todo ello ya realizado anteriormente por el mismo taller sevillano y diseñados en su momento con vistas a este nuevo paso.
Los respiraderos, de momento, continuarán siendo de tela, a espera de que la tesorería de la cofradía permita su ejecución según el proyecto, aunque la intención es no demorarlo en demasía en el tiempo. El paso se verá este año en madera, y la cartela central del frontal irá ya dorada y estofada con el escudo de esta corporación del Martes Santo. La talla, en madera de cedro, está previsto que sea dorada en el futuro.
